Si se han vulnerado tus derechos como consumidor o usuario tienes derecho a reclamar. Incluso, en los casos más graves, podrás presentar una demanda de consumo. Estas demandas pueden ser individuales o colectivas, y en Nevvo contamos con el equipo adecuado para gestionarlas con éxito.
La Ley General para la Defensa de los Consumidores y Usuarios (RDLeg 1/2007) regula una serie de derechos de protección para los consumidores y usuarios. El ordenamiento jurídico trata de este modo de compensar el desequilibrio natural que existe cuando contratamos con grandes compañías.
En Nevvo contamos con abogados especialistas en derechos de los consumidores y usuarios, que podrán ayudarte a restablecer tus derechos mediante reclamaciones o demandas individuales y colectivas de consumo.
Nos encargamos de toda la reclamación. Solo necesitamos conocer los detalles y nos pondremos manos a la obra
Contactaremos contigo lo antes posible. Te pediremos la documentación y empezaremos
Salvo que la Ley exija tu presencia en el trámite, nos encargamos de gestionarlo absolutamente todo
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Si una empresa ha vulnerado tus derechos como consumidor o usuario o incumple la normativa en materia de consumo podrás exigir una hoja de reclamaciones. Mediante este documento puedes reclamar la reparación de un daño.
Lo habitual es tratar de resolver la controversia con el Servicio de Atención al Cliente de la empresa y, en caso de no tener éxito, presentar la reclamación a la Oficina Municipal de Información al Consumidor. Si tampoco hay acuerdo por esta vía se podrá presentar una demanda, que podrá ser individual o colectiva.
Las demandas en materia de consumo se rigen principalmente por la Ley General para la Defensa de los Consumidores y Usuarios. Pero también son de aplicación el resto de las normas en vigor.
Dependiendo de la gravedad de la lesión o del incumplimiento y del número de afectados, estas demandas pueden ser individuales o colectivas. Así, estamos ante una demanda colectiva de consumo cuando un grupo de consumidores se organiza para reclamar la reparación de un daño que les afecta a todos. Esta puede ser la mejor vía para obtener una indemnización en casos en que un gran colectivo ha sido afectado. ¡La unión hace la fuerza!
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Para iniciar una reclamación en materia de consumo necesitaremos toda la documentación relativa al caso. Desde los contratos y facturas hasta los folletos informativos y carteles publicitarios pueden resultarnos de utilidad.
Si ya has presentado la hoja de reclamaciones también la necesitaremos para gestionar la fase amistosa del proceso o bien estudiar cómo se desarrolló si tenemos que pasar a la fase judicial.
En el caso de las demandas colectivas de consumo también necesitaremos contactar con el público afectado. Puedes ponernos en contacto con tu plataforma de afectados o informarnos para que te ayudemos a organizarla.
En primer lugar acudiremos al Servicio de Atención al Cliente de la empresa incumplidora. Allí trataremos de llegar a un acuerdo para que te indemnicen, te presten el servicio al que tienes derecho o compensen de algún modo la lesión causada.
Si la empresa se niega a atendernos acudiremos a la Oficina Municipal de Información al Consumidor. Allí tendremos otra oportunidad de negociar. Pero esta vez contaremos con la mediación de la Administración.
En el caso de que sigamos sin llegar a un acuerdo acudiremos a los tribunales. Podemos presentar tu demanda de consumo u organizar a una plataforma de afectados. En cualquier caso, tras ganar el proceso declarativo (que determina la responsabilidad de la empresa) podremos esperar a recibir la indemnización o acudir a un proceso ejecutivo (para obligar a la empresa a cumplir la Sentencia si no lo hace voluntariamente)
Las reclamaciones de consumo tienen por objetivo que se cumpla la normativa en materia de consumidores y usuarios. Es decir, respaldan tus derechos como consumidor y usuario, que van más allá del mero cumplimiento contractual.
Por ejemplo, como consumidor tienes derecho a recibir una información clara, veraz y completa sobre los bienes y servicios adquiridos. También a desistir de los mismos y a gozar de plazos de garantías o políticas de precios y condiciones generales.
Cualquiera que sea el derecho que se haya vulnerado, las reclamaciones y demandas de consumo persiguen restituirlo. Y cuando esto sea imposible se deberá compensar mediante una indemnización.
Pese a las peticiones de muchos juristas, en España todavía no existe una Ley que regule las demandas colectivas específicamente ni hay juzgados especializados. En cualquier caso, las asociaciones de consumidores y los grupos de consumidores afectados pueden organizarse para presentar una demanda colectiva.
En estos casos se distribuirán los costes del proceso, resolviéndose todas las pretensiones en el mismo proceso declarativo. Sin embargo, puede pasar que la empresa no cumpla voluntariamente con la Sentencia, o al menos no con todos los afectados. En este caso habría que acudir a procesos ejecutivos individuales.
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